La unidad 6 en el curso en el que me hallo inmersa nos pide una reflexión en la que consideremos las debilidades, fortalezas, amenazas y oportunidades de que mi centro se lance a esto del ABP. De forma esquemáticas están han sido las conclusiones:
En los tiempos que corre en los que la Administración nos sobrecarga con papeles y nos resta por tanto de reflexión y puesta en práctica de nuevas ideas y proyectos el profesorado anda muy desmotivado, tanto es así que cuando una dice que está realizando un curso como el presente sin acreditación alguna algunos compañeros te miran como si contemplaran un "bicho raro" y te dicen "tú que tienes tiempo para eso". Este es el principal motivo por el que innovar cuesta y es más fácil el seguir el día a día del libro porque ya nos viene dado casi todo, ya que trabajar por proyectos como ya acordamos unánimemente los que asistimos al MOOCafé requiere de un esfuerzo y un trabajo que debes de estar dispuesto a realizar. Y unido a esa desmotivación del profesorado, la crispación que a veces encontramos en los centros y que dificulta la realización de ABPs de centro.
La realidad de las clases tampoco favorece esta perspectiva. Nos encontramos clases masificadas con alumnado de muy distintos ritmos de aprendizaje, en el que la inclusión es un hecho real pero que a veces, en mi caso como maestra de inglés, no nos vemos apoyados con recursos ni humanos ni materiales. Y vuelvo a decirlo, en mi caso que imparto inglés. Ni las editoriales facilitan material ni el centro dispone de recursos humanos para que podamos hacer frente a niños con necesidades educativas especiales que a veces suponen un 14%.
Sin embargo, a pesar de las amenazas y debilidades antes expuestas soy muy positiva ante este enfoque pero quizás podríamos empezar desde los cimientos y realizar pequeños ABPs como el que yo me he propuesto con reducido número de profesorado en cada uno para poder plantearnos en un futuro la realización de un ABP de centro. Es decir, primero construir un clima que favorezca la socialización en el aula y se extienda fuera de la misma a la vez que crecemos intelectualmente en su realización porque sólo así, creo, realizaremos un ABP de centro con éxito. Contamos para ello con un equipo directivo que está muy implicado en las innovaciones que les planteamos, con ganas de avanzar y con un grupo de compañeros que no le gusta estar estancado para nada y que pudiera ser el elemento estimulador que tire de los demás. Y no quiero terminar sin decir las magníficas instalaciones y recursos digitales de los que dispone el centro y que facilitaría y facilita de hecho nuestra labor de aula.
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