Mientras en el modelo tradicional que comienza con una clase donde la instrucción está en manos del docente y el estudiante realiza una actividad para mejorar lo asimilado. El profesor realiza un papel activo, de proveedor de información y evaluador, meros transmisores de conocimiento frente al papel pasivo del alumno. Fuera del aula le corresponde al alumnado realizar los deberes o tareas para consolidar lo aprendido.
En el flipped classroom los alumnos reciben la instrucción a través de medios indirectos por ejemplo videos en su casa. Ya en el aula, el alumno realiza las distintas actividades para mejorar el aprendizaje y el profesor es un apoyo o guía. El papel activo lo desempeña el discente al aplicar, comprender, crear, analizar y también evaluar; construye su propio conocimiento mientras el docente asesora y facilita ese camino. En este proceso la retroalimentación inmediata y el debato son una constante.
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